En 2007 los arquitectos Emiliano López y Mónica Rivera proyectaron Hotel Aire de Bárdenas, emplazado en un campo de trigo a las afueras de Tudela en el límite de un parque natural de paisajes desérticos, las Bardenas Reales de Navarra. La personalidad del proyecto les llevó a producir una colección de mobiliario y piezas de baño exclusivas, que ahora se expone en Room Design Gallery en Barcelona, hasta el 16 de febrero de 2011.
El proyecto hotelero concebido como una sucesión de espacios interiores protegidos y confortables para contemplar el exterior, exigía un mobiliario afín a su concepción. Los arquitectos buscaron "piezas acordes con las intenciones del diseño del edificio: polivalentes, de carácter anónimo, básico; sin embargo, algo siempre fallaba: el material, color, altura, redundancia de detalles y el precio."
Así decidieron diseñar sus propias piezas, y trabajando en estrecha relación con el promotor y los encargados de la construcción, los arquitectos dieron forma a duchas, bañeras, lavamanos, camas, estructuras para las diversas mesas, taburetes y sillones. Todas las piezas diseñadas bajo la premisa de la sencillez, emplean el mínimo de materiales y uniones, sin piezas móviles o accesorios.
En diálogo con el cierzo, el viento de noroeste de la región, el edificio se compone de una serie de estructuras sencillas, monocromáticas y cúbicas. Su posición dispersa permite ver a través de los espacios, minimizando la apariencia masiva para generar un juego de luces y sombras. La estructura del edificio es de acero y toda la construcción se realizó en seco excepto las soleras de hormigón.
Vistas del exterior del hotel, un conjunto ligero y desmontable, asociado a las construcciones agrícolas de la zona.