Tras más de cinco años desde su reapertura, el Circo Price renueva su identidad visual de la mano del estudio barcelonés Toormix. El imagotipo, que reproduce las formas arquitectónicas del espacio escénico, busca identificarse con las nuevas actividades que oferta la institución.
Cartel, Toormix para Circo Price, 2012.
El circo Price nació en el año 1868 en su emplazamiento original del madrileño Paseo de Recoletos. Unos años después, mudó su actividad a la Plaza del Rey, donde se instaló permanentemente y donde quedó irremediablemente ligado a la memoria de los madrileños. Tras más de cien años dedicados al mundo circense, el espacio cerró sus puertas en 1970.
Antiguo y nuevo imagotipo, Toormix para Circo Price, 2012.
En marzo de 2007, el Ayuntamiento de Madrid decidió retomar el proyecto y reabrir sus puertas en la antigua fábrica de galletas Pacisa, situada en la Ronda de Atocha. Dos años después, el estudio barcelonés Toormix comenzó a colaborar con la institución, creando un código gráfico que identificase el espacio y retocando el logotipo original, la cara de un payaso.
Aplicación del imagotipo en diferentes colores, Toormix para Circo Price, 2012.
En 2012, Toormix vuelve a trabajar con la institución. La nueva identidad coincide con un momento en el que el espacio escénico se encuentra diversificando su oferta hacia otras ofertas de ocio, como la música, la danza o el teatro. La renovación de la imagen busca identificarse con estas nuevas actividades y no concentrarse exclusivamente en el mundo circense.
Planta del espacio e imagotipo, Toormix para Circo Price, 2012.
La nueva identidad se forja en torno al concepto del círculo que, según el estudio, representa tanto el espacio escénico del circo como la riqueza de su programación. El imagotipo muestra, de este modo, una circuferencia que acoge en su interior el nombre de la institución. Los diseñadores han optado por dejar en segundo plano la apostilla “teatro circo” y enfatizar el nombre propio “Price”, que es como realmente se conoce el espacio entre los habitantes de Madrid. Del mismo modo, se ha añadido “Madrid” al texto, con el objetivo de reforzar la vinculación entre el espacio y la ciudad.
Transposición de la tipografía utilizada para el imagotipo en el espacio escénico, Toormix para Circo Price, 2012.
Transposición de la tipografía utilizada para el imagotipo en el espacio escénico, Toormix para Circo Price, 2012.
Tipografía Gravur.
La imagen utiliza una tipografía exclusiva compuesta por semicírculos transpolados de la configuración circular del anfiteatro y de su platea. El resultado es una tipografía con una personalidad muy marcada, que combina unas formas redondeadas con una escritura legible y limpia. Para el resto de la estrategia comunicativa se ha utilizado la tipografía Gravur.
Cartelería, Toormix para Circo Price, 2012.
Cartelería, Toormix para Circo Price, 2012.
Cartelería, Toormix para Circo Price, 2012.
Folletos, Toormix para Circo Price, 2012.
Detalle del folleto, Toormix para Circo Price, 2012.
Código de colores, Toormix para Circo Price, 2012.
Papelería, Toormix para Circo Price, 2012.
Imagen gráfica, Toormix para Circo Price, 2012.
Papelería, Toormix para Circo Price, 2012.
Papelería, Toormix para Circo Price, 2012.
Papelería, Toormix para Circo Price, 2012.
Papelería, Toormix para Circo Price, 2012.
Por otra parte, se ha depurado el código visual preexistente de la papelería y la cartelería: los diseñadores han reforzado la relación entre titulares, imágenes y colores, han dotado de una mayor visibilidad a las imágenes, situándolas a sangre y evitando que la tipografía las oculte, y han mejorado la legibilidad de la información, gracias a una jerarquización más clara y ordenada.
Banderolas, Toormix para Circo Price, 2012.
Imagen gráfica aplicada a la fachada, Toormix para Circo Price, 2012.
Banderolas, Toormix para Circo Price, 2012.
Cartel, Toormix para Circo Price, 2012.
Cartel para mupi, Toormix para Circo Price, 2012.
«La nueva identidad se forja en torno al concepto del círculo que, según el estudio, representa el espacio escénico del circo» PUNTO.
Si seguimos dando discursos de que las formas representan cosas por sí solas (ejemplo: círculo = riqueza de programación)seguiremos engañándonos a nosotros mismos como profesionales, ya que dentro de 5, 10 o 15 años el cículo significará lo que toque en ese momento…
Vaya cagada cambiar un logo que funcionaba y que ya estaba instalado en la memoria de todos…