Mitad ejercicio de creatividad, mitad homenaje
El diseñador surcoreano Jeonghyun Ahn es el responsable de Canvas un interesante —e impoluto— altavoz de líneas mínimas que propone, además de un aspecto arrollador, una curiosa vuelta de tuerca en la percepción y concepción de los sistemas de audio de uso doméstico, al menos en teoría.
Formal y conceptualmente inspirado en los lienzos en blanco —según su creador—, pero fuertemente influenciado por la etapa Braun de Dieter Rams, la propuesta de Ahn se construye y se entiende desde un pragmatismo visceral y la idea de recategorizar o reetiquetar los sistemas de audios como electrodomésticos esenciales. «Todos los cuadros comienzan con un lienzo en un blanco puro. Ya sean surrealistas, figurativos o modernistas, todos comienzan igual. He diseñado un altavoz para que la gente pueda ‘pintar’ en él, cualquier tipo de música», comenta Ahn desde su estudio en Seúl.
Otro aspecto interesante de Canvas es su semblante de mobiliario, un aspecto conseguido adrede que dota al producto de una versatilidad casi desconcertante pero ciertamente atractiva. Su marco de acero tubular, su inclinación rígida de 75 grados o su rejilla frontal de celdas circulares, son algunos de los rasgos estéticos que definen a una apuesta arriesgada pero interesante.
Para terminar es necesario mencionar el detalle menos atractivo: su alimentación y autonomía. Con las posibilidades que existen hoy en día, una condición portátil hubiera sido lo ideal. Un altavoz de gama alta y de estas características debería incluir batería. Aún así, Canvas convence.