Tipple Topper: en la búsqueda de sentar precedente
StrangeLove, compañía oceánica especializada en la producción y venta de bebidas orgánicas sin alcohol, ha decidido confiar una vez más en la experiencia y saber hacer de Marx Design, la agencia creativa neozelandesa fundada y dirigida por Ryan Marx, para dar vida a una novedosa línea de guarniciones deshidratadas para cócteles.
Al tratarse de una tipología de producto relativamente desconocida para el gran público, el cliente requería un enfoque, no solo disruptivo desde lo visual para marcar de por vida al observador, sino también, altamente funcional desde lo informativo para mostrar a los consumidores sus incontables posibilidades. ¿La respuesta? Llegó y arrasó.
El primer acierto de Tipple Topper, como ha sido bautizada la línea, ha sido la elección del contenedor, un discreto sobre con pliegues que permite mayor flexibilidad para favorecer el “buzoneo” y diferentes posiciones de reposo. En este aparatado también, las superficies planas son verdaderos lienzos en blanco para dar rienda suelta a la imaginación. En segunda instancia hay que decir que es la paleta. Efectivamente, haber optado por una gama de alto contraste, rozando lo flúor, aporta ese toque de estridencia tan necesaria para destacar en los puntos de venta. Por último, y no por eso menos importante, el ecosistema tipográfico. Sublime. Con aires “monoespaciado”, desde el logotipo, lema,… hasta el etiquetado y descripciones generales, todo en el universo visual de Tipple Topper vibra en la misma frecuencia.
Para terminar dos detalles que no hacen otra cosa que mejorarlo todo: La deliciosa familia iconográfica y la campaña gráfica offline para el lanzamiento. Todo impecable.