Una pieza que se sitúa anclada a la pared y surge como una rama que se abre paso entre el cemento y los ladrillos y aporta luz y profundidad a los espacios. Al igual que el signo ortográfico –la coma- sirve para indicar las partes de una frase y ordenar un texto, este separador sirve para ordenar los espacios, sin separarlos.
Disposición opcional · Loft de Marylin Missoni
La idea era reorganizar los ambientes mediante un juego gráfico que reconvirtiese un muro separador en un elemento etéreo y multifuncional. Con esa premisa, la diseñadora Ana Yago ha generado un elemento que se adapta a diferentes hábitats y que consigue un juego visual sugerente de volumen ligero, reorientando la concepción del muro divisor con un elemento estructural que se incorpora a la construcción.
Disposición final · Loft de Marylin Missoni
En esencia, este elemento poético se compone de dos módulos combinables en diferentes posiciones y desarrollados mediante tableros chapados en madera con alma de estructura metálica. Una pieza que nació como exclusiva para el loft de la artista Marylin Missoni en Los Ángeles, pero que por su naturaleza modulable que le permite actuar como simple ordenador del espacio, al mismo tiempo que metamorfosearse en un mostrador, una estantería, un expositor o un contenedor, entre otras posibilidades, se convertirá en una pieza de la próxima colección que la diseñadora valenciana prepara para una conocida firma internacional de productos de lujo.
Me gusta el título de tu post…
Adoro esa «pausa en el espacio». Me parece un hallazgo para ordenar los interiores con un toque muy sutil y cargado de poesía.