Conversando con el joven diseñador industrial Alexander Chan
En los medios existe amplia visibilidad para los diseñadores cuyos productos están en el mercado o porque imprimen 'marca' con sus intervenciones, pero los 'pensadores' del diseño, cuyos productos son textos, ideas, críticas externadas en revistas, blogs, entre otros medios de comunicación, son casi invisibles.
Hacer diseño en la actualidad conforma un poliedro de expresiones, talentos, estilos de actuación profesional: hay quienes producen, fabrican, comercializan, mercadean, otros se preparan en las escuelas y universidades u optan por una maestría en el extranjero. Diseñacr también se interesa en el 'estado de la cuestión' de esas etapas intermedias, indagando en aquellos diseñadores que se mantienen en el proceso de (in)formación.
Alex Chan, luego de graduarse en 2006 en la Escuela de Ingeniería de Diseño Industrial del Instituto Tecnológico de Costa Rica, y de lapsos de experiencia en la industria local, tal y como se dice en la jerga juvenil, decidió 'abrirse' al mundo; además de establecer canales para externar su pensamiento acerca de la trascendencia del diseño como un árbol de muchos ramajes. Actualmente realiza estudios en la Universidad de Ginebra, Suiza. Conozcamos algunos de sus estímulos para 'alzar vuelo' y ampliar las oportunidades y fortalezas que le otorga su profesión de diseñador.
¿Qué contribuye a tu profesión 'abrir vuelo' para conocer el mundo?
Es lamentable que en Costa Rica, en cuanto a diseño, no pasa mucho. Hacerlo, te permite permearte de tendencias, pero más que eso permite mantenerte actualizado de otras formas de manifestación.
¿Cómo te dispones para recibir información del entorno?
Sólo trato de identificar y estar atento a lo que fluye. En general me interesa todo lo que se relacione con diseño. Desde el gráfico hasta el producto, la moda, la arquitectura del espacio interno, entre otras. Trato de estar anuente a presentaciones, conferencias, charlas e incluso workshops. Sin olvidar los concursos. Pero en el fondo lo que me interesa es conocer acerca de temas que demuestren que hubo un pensamiento detrás de la obra, no solo 'fotos bonitas'.
Renderizado del proyecto para una silla plegable, de Alex Chan, 2006.
¿Cómo los registras o documentas?
Desde hace un tiempo para acá los empecé a documentar en un blog personal que creé. El blog nació porque no resulta así de evidente publicar en otros medios, sobre todo los medios impresos. Entonces, decidí dejar de depender de otros y bueno hoy por hoy la tecnología te da esa oportunidad.
Trato de asistir a eventos que llamen mi interés y que se relacionen con el campo del diseño o con áreas creativas y luego me tomo mi tiempo para publicar las notas, recalco que me tomo mi tiempo porque en realidad me lleva más trabajo del que quisiera tener para escribir un texto en el que pretendes hacerlo bien, conciso, donde puedas transferir con tus palabras el mensaje que recibiste.
Cooktop1, plantilla para cocina de gas, en colaboración con Juan Carlos Perez.
¿A qué otros aspectos que te permiten estar (in)formado te expones? la teoría del diseño, por ejemplo, ¿qué autores sigues?
No sigo ningún autor en especial. Pienso que si lo haría de esa manera reduciría el bagaje que llega a mí. Me mantengo abierto a recibir dicha información pero sobre todo la evalúo, si la considero útil o no.
¿Qué piensas de los medios para la autoformación personal: internet, redes sociales, videos, televisión, entre otros?
Internet es una herramienta en constante expansión. Con un poco de tiempo puedes encontrar de todo. Luego, nos queda descartar y reciclar. Además de estar atento al riesgo a la adicción que produce este medio.
En cuanto a las redes sociales, son útiles para conocer nuevos proyectos, para compartir información de manera inmediata.
Algunos de los productos juveniles diseñados por Alex, como camisetas alegóricas a un héroe nacional costarricense, y un producto en cuero proyectado para una nueva tienda en Umbria, Italia.
¿Cómo potencializar esas posibilidades?
La autoformación no te otorga ningún título que respalde lo que aprendiste o lo que viste. Entonces toca a cada quien traducir lo aprendido ya sea en un texto, en un manifiesto o bien convertirlo en un producto.
Volvamos la mirada a lo que ocurre en diseño industrial, ¿cuál es la realidad de esta disciplina en el terreno internacional actual?
En Costa Rica estamos en pañales y sin mucho apoyo institucional, aparte de algunas manifestaciones consideradas de interés en los últimos meses (entre otros eventos el Festival Internacional de Diseño FIDD, Diseño Responsable, Diseño 10, Bienal Costarricense del Mueble, la BID Madrid).
En España, sé que la situación actual no es la mejor, en realidad la Comunidad Europea salvo quizás Alemania, que es una potencia industrial. En Europa, mucho de las tendencias la marcan los diseñadores alemanes.
Italia, es bien conocida como la cuna de esta disciplina. Los italianos viven del diseño y lo aman. El Made in Italy es un sello respaldado por una buena reputación que se debe a una planificación hecha por la industria y el gobierno italiano hace muchos años atrás. De hecho, el mes pasado en las transmisiones acerca del 150 aniversario de la Unificación de Italia, un historiador italiano hacía un recorrido por todos los acontecimientos que han contribuido para formar la Italia de hoy, y me llamo la atención cuando mencionaba la aparición de la Vespa, decía que ese producto marco el punto de partida de lo que hoy es el ya consolidado Made in Italy o Il fatto in Italia como lo llaman ellos.
En cuanto a Suiza, la mayor parte del auge del diseño se encuentran en la parte alemana del país. Aunque en la parte romana se aprecia el interés de la industria por “descentralizarlo” de la parte alemana.
Luego está el caso asiático, pienso que con eso del Made in China se debe de tener mucho cuidado, ya que a ellos aparentemente lo que les concierne es el volumen, en detrimento de la calidad, un factor muy importante en el diseño.
Alex, tras graduarse de Diseñador Industrial en 2006, desarrolló algunos productos para la industria local costarricense. Fotos y renderizados cortesía de Alex Chan.
En nuestros países, ¿por qué muchos de los proyectos de los nuevos diseñadores se quedan en las memorias de los computadoras, ni siquiera llegan a la etapa de modelo o prototipo?
Me parece que eso se debe a la pobre industria que existe, que se limita a seguir un modelo corto 'plazista', donde prácticamente se limita al ensamblaje de partes. Existen muy pocas empresas donde los diseñadores puedan permitirse crear. Luego, si eres un proyectista independiente, es difícil encontrar una oportunidad para colocar tu producto.
Las personas (gobernantes, industriales, mercado) no están preparadas para apreciar, o menosprecian la capacidad creativa local. Vemos que normalmente lo que logra subsistir en el ámbito de diseño independiente o “alternativo” es el diseño gráfico; sin embargo me parece que su ámbito de trabajo está un poco prostituido.
¿De qué mejoría de la calidad vida que ofrece el diseño se habla entonces si esos proyectos quedan atorados por falta de oportunidades?
Permanecen atorados, no hay mejoría, salvo para el diseñador mismo quien continua ejerciendo su creatividad.
¿Cómo se puede abrir esos bordes tan cerrados?
Tanto la industria como el gobierno deberían de llegar a un acuerdo que permita dar un soporte a los diseñadores. Luego tocaría crear el mercado local, que es educar a la población y convencerlos con pruebas reales (un compromiso de calidad y servicio) que nuestros productos e industrias pueden ser tan buenas como los foráneos. Eso en cuanto a la tarea del sector gubernamental, y en cuanto al sector privado, lograr convenios entre los principales centros de enseñanza del diseño y las industrias para promover talleres conjuntos que luego se puedan expresar en colecciones que esas industrias puedan poner en sus vitrinas bajo un sello de Diseñado en Costa Rica.
Alex, a manera de conclusión, ¿cómo lograrlo?
Se requiere –como se dijo–, un compromiso de apoyo por parte de la industria y el sector privado e instancias gubernamentales, además de ofrecer lo mejor del propio talento creativo por parte de los jóvenes diseñadores.
Para quienes nos interesa estar al día del desarrollo de esta profesión en Costa Rica, es satisfactorio cerciorarse de que sí existe pensamiento puesto en ella, cuyas repercusiones tarde o temprano comenzarán a replicar y a atraer visibilidad hacia los distintos actores que intervienen, para descubrir entre ellos a muchos jóvenes que se forman en el exterior –como Alex–, jóvenes pensantes y críticos del diseño y su devenir.
Felicidades Alex por estos aportes, el diseño requiere el análisis de lo que tenemos alrededor, de las tendencias e innovaciones.