El jurado de la doceava edición de la Bienal de Arquitectura, del Colegio de Arquitectos de Costa Rica, distinguió a Luz Letelier y Pietro Stagno con el Gran Premio, por un proyecto vacacional construido en Playa Preciosa, Península de Osa, Pacífico Sur costarricense. Entrevisté a estos arquitectos para conocer sus pensamientos y visión de una arquitectura reconsiderada por la sostenibilidad.
Casa "Atrevida", Arquitectos Luz Letelier y Pietro Stagno. Fotografía Sergio Pucci.
LFQ: En la perspectiva de sus vidas ¿qué representa la arquitectura?
Luz Letelier y Pietro Stagno: Representa la alternativa de explorar el diseño en aras de satisfacer el manejo de la forma, los materiales, y las técnicas constructivas. Nos interesa -por ejemplo-, experimentar la fuerza de unir materiales como el metal con el concreto, la madera con el concreto, o la cerámica con la madera; se nos permite expresar ese encanto creativo por los detalles y por ese sentido de unión.
Casa "Atrevida", Arquitectos Luz Letelier y Pietro Stagno. Fotografía Sergio Pucci.
LFQ: ¿Dónde queda el ser humano en ese proceso?
LL y PS: La arquitectura nos posibilita -a través del diseño del espacio-, acercar las vivencias de la gente para que encuentren conexiones, vínculos, nexos con el entorno y la cultura. Nuestra intervención busca que los espacios propicien la unión y conecten el interior con exterior para disfrutar el confort, el paisaje y valorar las riquezas del entorno.
Casa "Atrevida", Arquitectos Luz Letelier y Pietro Stagno. Fotografía Sergio Pucci.
LFQ: ¿Qué les prometió la arquitectura, para que se decidieran por esta profesión?
LL y PS: En nuestras familias nos preceden arquitectos. El abuelo de Luz -por ejemplo, expresa Pietro-, fue el director de tesis de mi padre (se refiere al destacado Arquitecto Bruno Stagno, que junto con su madre, la arquitecta Jimena Ugarte, dirigen el Instituto de Arquitectura Tropical).
Estos antecedentes influyeron al ejercer un espectro de habilidades que nos permitieran resolver tantas necesidades tan latentes en la población.
Detalle del diseño interior, Arquitectos Luz Letelier y Pietro Stagno. Fotografía Sergio Pucci.
LFQ: ¿A que estímulos se refieren?
LL y PS: Palabras como materialidad, la energía de la identidad local vinculados a la sostenibilidad, pueden impactar a los espacios para acrecentar un estilo de vida. Se trata de buscar ese valor que equilibra la inestabilidad de la balanza para recuperar lo sencillo, estimular la contemplación de lo natural y cultural, y desenchufarse de las falsas vanguardias.
Además, por supuesto de apreciar la luz, la sombra, la brisa, que son tan característicos en la arquitectura tropical.
Casa "Atrevida", Arquitectos Luz Letelier y Pietro Stagno. Fotografía Sergio Pucci.
LFQ: ¿Son estímulos sensoriales pero también de carácter intelectual y espiritual?
LL y PS: Es cierto que vinculan aspectos sensoriales, espirituales, que reflejan la cultura del pueblo. Pero reflejan además una manera de ver la vida, de enfrentar a la sociedad, observando con respeto las condiciones del entorno.
Uno cree en la estética, en la armonía de la vida, y eso lo quiere transmitir a los demás. Entonces la profesión nos permite soñar, debemos ser soñadores, si no lo hacemos no hay arquitectura, no podemos ser meros ejecutores o solucionadores del proceso.
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Detalle de circulación. Fotografía Sergio Pucci.
LFQ: ¿Cuál posición asumen ustedes respecto a una arquitectura tan cambiante y donde todo se parece?
LL y PS: Ambos pertenecemos a una generación que ya alcanzamos madurez. En la pasada CLEFA realizada en San José en el mes de abril, por ejemplo, se discutieron temáticas, como lo intangible, el efecto de la luz y la sensorialidad, el sentir las texturas para provocar y generar una espacialidad.
La arquitectura existe por la capacidad humana de percibir y estimular la sensibilidad de todas esas personas que habitarán nuestros proyectos.
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Detalle de jardín. Fotografía Sergio Pucci.
LFQ: ¿Qué opinan respecto a qué hoy todo se parece?
LL y PS: No hay formas predeterminadas, copiar un determinado proyecto de un famoso arquitecto extranjero, no significa que vas a lograr resolver lo que tú buscas. No todo lo nuevo produce asombro y lo que buscamos es producir dicho asombro, ese carácter de sorprenderse por algo.
Uno trata de estar al día con todo, con el uso de la tecnología, con las tendencias, pero la exploración real de la arquitectura debe ser mas plástica, mas sensorial, y crear a partir de un lienzo blanco. Creemos que a veces la industrialización, como la digital, nos aleja de lo humano, de lo íntimo y mas cotidiano, como dar al usuario la alternativa de tocar una cerámica, de oler la madera, de sentir la lluvia, el flujo de la brisa, o sorprenderse al ver los rayos del sol penetrando a los espacios.
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Dormitorio. Fotografía Sergio Pucci.
LFQ: ¿En qué se innova actualmente?, y ¿qué significa innovar?
LL y PS: Quizás el criterio de innovar es una experiencia de carácter local, innovar, por ejemplo en la Península de Osa no es igual que hacerlo quizás en Barranquilla, Colombia.
Quizás se innova al utilizar el material, y al manejar la técnica o disposición del uso de los elementos que provocan dicho asombro.
Nos interesa la conexión transdiciplinaria entre la arquitectura y la biología -la biónica-, o cómo puede cambiar, con el manejo del espacio, las conductas de uso de dicho espacio.
Intercalar lo viejo con lo nuevo -por ejemplo-, rescatar lo antiguo aprovechando lo que ofrecen las nuevas tecnologías, aquello que ya existe y es cotidiano, sacarlo del anonimato y traducirlo a la vida actual con todos sus rigores.
LFQ: ¿Qué representa para ustedes el premio de la Bienal de Arquitectura?
LL y PS: Se presentaron 60 proyectos nacionales y 20 internacionales, y nos dieron el Gran Premio. En lo personal representa mucho, nos cayó de maravilla, pues sentimos que doce años de dedicación al estudio de arquitectura, hoy se ve culminado, el premio marca un ciclo profesional pero debemos continuar en el proceso que el estímulo desencadena.
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Detalle del baño. Fotografía Sergio Pucci.
LFQ: ¿Qué aspectos fueron considerados para la premiación?
LL y PS: La premiación distinguió una vivienda de carácter vacacional en la Península de Osa -como se dijo, en Playa Preciosa, Puerto Jiménez-, los criterios se basaron en la sostenibilidad del proyecto, y en los rigores internacionales. Al jurado le interesó el uso específico del bambú gadua, material amigable, verde por excelencia.
Como parte del proyecto, se capacitó a los trabajadores para su uso, se trajo a un especialista de Colombia que en cuatro meses desarrolló las técnicas de manejo de la gadua y fue muy exhaustivo en todos sus detalles.
LFQ: ¿Qué otros aspectos observó el jurado?
LL y PS: La casa ofrece una respuesta al entorno y se fomenta las fortalezas de la naturaleza, sobre todo los árboles; se levanta del suelo para aislar la humedad y no impactar al terreno; se aplican conceptos de bioclimatismo, sirviéndose de las transparencias que posibilita el uso de petatillos y cedazos.
Es una casa para vivirla en la playa tropical, para vacacionar. Le llamamos “la casa atrevida” por sus connotaciones y uso de materiales no convencionales. Posee un a estructura sismo-resistente de dos plantas. Son trecientos metros cuadrados con un corredor exterior por donde deambular sintiendo el paisaje y aminorar el clima de la zona que es húmedo y caluroso.
Detalle del barandal. Fotografía Sergio Pucci.
LFQ: Esta pareja de arquitectos se distingue, además, por diseñar y fabricar productos de uso cotidiano y domésticos dentro de su visión de lo sencillo y que rescate el cotidiano; pero ese será un futuro “post” de este blog. ¿Cómo resolvieron el mobiliario en tanto se les premió también por el diseño interior?
LL y PS: El mobiliario fue diseñado por nosotros, y se fabricaron localmente considerando soluciones muy tolerantes con lo existente en el mercado o reinventando su función. Ahí hay mucha creatividad.
Detalle del lavatorio. Fotografía Serguio Pucci.
LFQ: Quizás, como reflexión final quisiera preguntarles ¿Qué aspectos bondadosos del proyecto consideran ustedes que no fueron observados por la bienal?
LL y PS: La verdad que quedamos muy satisfechos, además del Gran Premio de la Bienal, como tu afirmas, nos dieron el premio de la revista Su Casa en la categoría del Diseño Interior, y el proyecto obtuvo el premio al Paisajismo.
Deducimos que se ven premiados nuestros valores y convicciones ante el oficio, y esto debe ser un estímulo a proyectar hacia las nuevas generaciones, pues para lograr este reconocimiento, hay que demostrar su amparo en valores al ejercer la arquitectura.
Por lo general se premia a lo que está de moda, pero se hace -como en nuestro caso- por los principios de nuestras acciones, esos aspectos son mas silenciosos: como observar las soluciones al tratamiento del agua, los drenajes, para lo cual diseñamos soluciones muy creativas a los problemas de la contaminación, se diseñaron biofiltros y otros detalles que por lo general pasan desapercibidos a las miradas puestas en el proyecto.
Casa "Atrevida", Arquitectos Luz Letelier y Pietro Stagno. Fotografía Sergio Pucci.
