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La Navidad avergonzada

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Otro año más llega la Navidad. Esta vez, sin embargo, para muchas personas llama a las puertas temblorosa, exhausta y casi avergonzada.
Avergonzada porque Navidad también es compartir, pero el compartir ya apenas existe. Día tras día los españoles nos vemos forzados a ir olvidando el significado real de palabras como «cooperación», «colaboración», «comunidad» o muchas otras. Por suerte, el significado de estos términos se resiste a desaperecer por completo. De vez en cuando, hay quienes nos recuerdan que seguimos siendo seres sociales, que nos necesitamos absolutamente para todo.

En un mundo en el que el significado de la palabra compartir se halla desplazado desde la esfera de lo social a la económica, buena parte del diseño se sigue esforzando en cambiar para mejorar.

En España nos lo están intentando quitar todo. Por una parte «lo de todos » se convierte cada vez más rapidamente en « lo de unos pocos », y por otra, nos intentan despojar de nuestra capacidad para organizarnos y reinventarnos. Esperamos que no lo consigan.

En Madrid, la Navidad sigue llenando las calles de motivos decorativos que para muchos y muchas de nosotras no son sólo totalmente insulsos sino que llega a resultar hasta ofensivos. El árbol de Navidad que este año nos han plantado en la plaza de Callao, por ejemplo, es una muestra descarada de como Vodafone se publicita. Desde hace ya mucho tiempo las grandes empresas han comenzado a comprar lo que a mi modo de ver no debería mercantilizarse, desgraciadamente parece que todo vale. La aglomerante cabalgata de Reyes que se celebra todos los años es otra maldita campaña publiticaria consumista. No, Vodafone no es es Papá Noel, por mucho que compartan color.

De manera totalmente opuesta a lo que ocurre en Madrid, en Hasselt (Bélgica), el árbol de Navidad de la plaza central de la ciudad se erige como una orgullosa muestra de colaboración ciudadana.
En esta ciudad la agencia Mooz ha lanzado la idea de levantar un árbol navideño conjuntamente entre todos los habitantes. Para este propósito, los ciudadanos han ido aportando de manera voluntaria un total de 5.000 piezas entre platos y tazas hasta crear un magnífico árbol de porcelana de 9 metros de altura.

Por otra parte, si entendemos el mundo del Diseño desde la perspectiva de la innovación social y de la sostenibilidad, podremos llegar a comprender que diseñar consiste también en proporcionar servicios. Por tanto, no nos sorprende la campaña denominada «comparte tu mesa» que en España están desarrollando estas Navidades los diseñadores y expertos en comunicación de Garcia y Yoolab Team. Para muchos y muchas las fiestas de este año serán unas de las más duras en mucho tiempo, pero, según los creadores de la plataforma compartumesa, «cuando peor se ponen las cosas mejor responde la gente».

La plataforma se propone como lugar de contacto para aquellas personas que no tengan con quien cenar esta Nochebuena, y, como «circustancias excepcionales exigen respuestas excepcionales», a través de ella se pretende que estas personas puedan ser acogidas en casas ajenas para cenar con completos desconocidos. Aquí podéis encontrar el video de la inciativa.

 

 

 

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