Nuevas maneras de construir hábitats en Marte con impresión 3D
Hasta el 31 de enero estará abierta la convocatoria de la NASA para la segunda etapa del 3D-Printed Habitat Challenge, un concurso multifase ideado por la agencia del gobierno estadounidense para descubrir nuevas maneras de construir casas donde los futuros exploradores de Marte y el espacio puedan vivir y trabajar. La competencia —que consta de tres partes— pide a los inventores que utilicen materiales fácilmente disponibles (en la tierra o en el espacio) y reciclables como materia prima para la impresión de los hábitats. El concurso es parte del programa Centennial Challenges, que la Dirección de Misión Tecnológica de la NASA lleva adelante para atraer a inventores de diversos orígenes y disciplinas e impulsar la tecnología en beneficio de la exploración espacial.
Primera fase: conceptos arquitectónicos en fabricación 3D
Durante la primera fase de la competición —que culminó en el mes de septiembre de 2015— la NASA otorgó una total de más de 45.000 euros en premios a los tres equipos ganadores. En aquella primera etapa, el reto consistió en crear conceptos arquitectónicos que pudieran realizarse a partir de fabricación 3D, aprovechando los materiales disponibles en el lugar. Se recibieron más de 165 proyectos, de los cuales 30 fueron juzgados y presentados en el Maker Faire de Nueva York, una de las mayores ferias de inventores y creadores del mundo. El primer premio fue para el equipo Space Exploration Architecture and Clouds Architecture Office por su diseño de Mars Ice House.
Segunda fase: innovación en la fabricación de materiales
Por su parte, para la segunda fase de este desafío —que comenzó en octubre pasado— se solicita a los competidores que se enfoquen principalmente en las tecnologías de materiales necesarias para fabricar componentes estructurales. Si bien la NASA pretende usar estas tecnologías para construir refugios para los futuros exploradores humanos en Marte, los mismos elementos también podrían ser aprovechados en la tierra, para producir viviendas asequibles donde sea necesario o donde el acceso a los materiales de construcción convencionales sea limitado. Así, mientras que en la primera etapa de la competición se premió la arquitectura y el diseño, la segunda fase está más centrada en la construcción, y el monto en premios otorgados sobrepasará el millón de euros.
Pero el objetivo de esta etapa sigue siendo el mismo: abrir nuevos métodos para la construcción de viviendas para los exploradores espaciales, basándose en materiales de impresión 3D disponibles y, en la medida de lo posible, reciclables. Para la segunda fase, la NASA se ha asociado con la Universidad de Bradley y ha recibido el patrocinio del fabricante de maquinarias Caterpillar, de la compañía de ingeniería Bechtel y de los fondos Brick & Mortar Ventures.
Tercera fase: fabricación de hábitats
Al finalizar esta segunda etapa del 3D-Printed Habitat Challenge, la agencia estadounidense lanzará la tercera y última fase de la competición, durante la cual se retará a los concursantes a centrarse directamente en la fabricación de estos hábitats.
«El refugio es una necesidad obvia cuando nos preparamos para explorar mundos más allá de nuestro planeta, pero el espacio y el peso a bordo de nuestros vehículos es precioso y está limitado por los muchos otros recursos que necesitaremos para sobrevivir», dijo Steve Jurczyk, administrador asociado de la Dirección de Misión Tecnológica de la NASA. “Es por eso que estamos buscando la tecnología para reutilizar los materiales que ya estaremos llevando y combinarlos con los que ya están disponible en nuestro destino. Si reciclamos aquí en la Tierra, ¿por qué no hacerlo en Marte?”, concluyó.