Caten es una intervención artística llevada a cabo por el francés David Letellier en el interior de la iglesia de Saint-Sauveur en Caen (Francia). La obra, una malla gigante de hilos suspendida en la nave central, confronta su naturaleza frágil y etérea con la piedra eterna que conforma el templo. Caten pudo verse del 17 de abril al 22 de abril de 2012.
Caten, David Letellier para la Iglesia de Saint Sauveur, 2012.
Caten toma su nombre de la catenaria, un concepto matemático que se refiere a la curva formada por una cadena suspendida entre dos puntos no situados en la misma vertical. La instalación dibuja una trama de 300 hilos suspendidos en el aire por dos cuerdas que se extienden a lo largo de la nave principal de la iglesia de Saint Saveur, en Caen. Estos hilos se arquean de manera cóncava por efecto de la gravedad y trazan en el espacio una cúpula invertida. La distancia que separa los hilos y las cuerdas fue calculada por ordenador en función de las dimensiones de la iglesia.
Con Caten, David Letellier ha buscado enfrentar las naturalezas del hilo y la piedra. El resultado es un juego dialéctico en el que se contrapone la eternidad de la iglesia con la fugacidad de los hilos, la estaticidad de la mampostería con el dinamismo de la instalación.
La instalación dispone de cuatro motores que se activan intermitentemente y la accionan, variando el dibujo de los hilos. Su colocación requirió la ayuda de diez estudiantes de la escuela de arte local, quiénes tejieron la red de hilos a partir de 2 km de hilo negro de 3 mm de espesor.
Al mismo tiempo, Caten reproduce una melodía inspirada en los salmos religiosos medievales, en concreto en el Himno a San Juan Bautista, que data del siglo VIII, y cuya letra sirvió al monje Guido de Arezzo para nombrar las notas musicales. En esta ocasion, la instalación emite una cadencia con las cuatro primeras notas de la escala. Las frecuencias graves resuenan en el espacio y amplifican el carácter transcendental de la iglesia.