«Era muy importante poder disfrutar de la vida al aire libre y del clima mediterráneo al máximo. Por eso, se planteó una vivienda abierta al exterior en todas sus estancias».
El estudio valenciano CU4 arquitectura, dirigido por Anna Ferrer y Manuel Martín, en colaboración con el arquitecto belga Stef Rogiers, ha diseñado y ejecutado Villa Alegría, una espectacular vivienda unifamiliar en Xàbia (Alicante), que «abraza» el exterior a partir de tres terrazas rodeadas de la naturaleza circundante.
Villa Alegría, que dispone de una parcela de 1.000 m2, se ubica a unos 2 km de distancia de Cala Blanca e incluye una vivienda en forma de ele que favorece la iluminación y la ventilación cruzada, conectando así el interior y el exterior de manera fluida. El diseño de todo el proyecto parte de un juego de alturas entre los diferentes niveles de la parcela, que desciende por la ladera del terreno desde la calle principal, que da acceso a la vivienda tanto a pie como en coche.
“El proyecto se enfoca como una segunda residencia familiar en la Costa Blanca. Para ellos era muy importante poder disfrutar de la vida al aire libre y del clima mediterráneo al máximo. Por eso, se planteó una vivienda abierta al exterior en todas sus estancias. Por la parte trasera, que da a la calle, se ha instalado una celosía que favorece la privacidad en todo momento”, explica Anna Ferrer.
La entrada a la residencia se produce por la parte posterior del inmueble. Mientras el ala derecha —que acoge la cocina y el salón comedor— se sustenta sobre la zona del garaje, la izquierda se asienta sobre una estructura propia, nivelando así el terreno para que toda la vivienda esté equilibrada en un mismo nivel. Una vez se sale de la casa hacia el exterior, se han definido tres terrazas independientes y descendientes, siguiendo la pendiente del terreno: una primera, seguida de un espacio a modo de terraza intermedio o de fire pit —que permite encender una hoguera cuando bajan las temperaturas— y, finalmente, la tercera, que abarca la piscina, el solarium y la cocina exterior anexa.
“Hemos realizado un intenso y extenso estudio de las pendientes, de las vistas y de las orientaciones para asegurar la mayor cantidad de luz posible. Incluso las barandillas de toda la vivienda son transparentes para no perturbar en lo más mínimo las vistas de la naturaleza circundante”.
La vivienda ocupa 184 m2 de superficie, a la que se suman otros 35 metros cuadrados de garaje, bajo la estructura de la vivienda. La primera terraza ocupa 62 m2, mientras que el lounge intermedio mide 35 metros m2 y la terraza inferior alcanza los 60 m2. La piscina mide, así mismo, 10 m de largo por 4 de ancho.
“Uno de nuestros cometidos en este proyecto ha sido definir todos los detalles técnicos, la gestión de los trámites administrativos y la coordinación con la constructora, unas cuestiones que son especialmente relevantes cuando los clientes residen fuera de España y que requieren de un socio arquitectónico local de confianza”.
