Una deliciosa vivienda unifamiliar de 115 m2
«Un hogar que se siente ‘verde’ no es un hogar donde se puede ver paisajes desde cualquier lugar, sino un hogar donde los residentes usan activamente los espacios y crecen junto con la naturaleza, por ejemplo, tomando una siesta debajo de un árbol, tocando una hoja, plantando un árbol o una flor. Con Melt House pensé que podía crear una experiencia original y una vida que se estaba olvidando», comenta Saito Satoshi, fundador de la práctica de arquitectura japonesa SAI y autor de Melt House, una deliciosa vivienda unifamiliar de 115 m2 ubicada al pie del monte Shigi, en la región de Kansai. Madera, luz y microjardines, son la tónica de una propuesta ciertamente encantadora. Ni siquiera su piel de chapa corrugada es capaz de romper el encanto de una casa única. Brillante.