El estudio del arquitecto israelí Ron Arad, en contraposición simbólica a las murallas y búnkers que caracterizan el territorio de Israel, ha envuelto este Museo del Diseño con una jerarquía de bandas que atrae al visitante bajo la estructura y a través de ella, transformando la vista en una experiencia, por lo menos, futurística . El edificio está concebido como escultura para que adquiera un ingenio y una poesía propios del mejor diseño. La obra ha sido premiado con el Condé Nast Traveller Innovation and Design for Culture el pasado mayo de 2009.
A principios de este año tuvo lugar en Israel la inauguración del Museo de Diseño, concebido por Ron Arad Architects. El proyecto ha durado cuatro años de construcción pero se engloba en un programa mas amplio de regeneración urbana de la ciudad. El alcalde de Holon, junto a la Managing Director Hana Hertsman invitaron a Ron Arad a crear un edificio icónico para liderar la imagen reinventada de la ciudad. La estructura, ideada con cinco sinuosas bandas de acero corten, pretende ser un acercamiento escultural que transforme el edificio en objeto de diseño.
El museo consta de dos espacios principales, una galería superior de 500 metros cuadrados que se caracteriza por su abundante luz natural y otra inferior que abarca la mitad y que implica una relación entre el visitante y el objeto, más íntima y personal. El nuevo protagonista urbano acogerá además de exposiciones, el Museo Nacional de Dibujo, la mediateca de Holon y la colección digital en un archivo multimedia. Todo ello será el germen que conlleve a una fundación del Museo del Diseño de Holon y su colección permanente que será desvelada en un futuro cercano.
