Solar Decathlon Europe 2010 es una competición de arquitectura solar y sostenible, organizada por el Gobierno de España, a través del Ministerio de Vivienda, y el de Estados Unidos, con la colaboración de la Universidad Politécnica de Madrid. Ubicada junto al río Manzanares, ha contado con una superficie de 30.000 metros cuadrados.
Este año se ha realizado, por primera vez, fuera de Estados Unidos, fruto de un acuerdo firmado por los gobiernos de los dos países (Memorandum of Understanding), a través del que se adquiere el compromiso de celebrar las ediciones americanas en años impares, y las europeas en años pares.
Solar Decathlon nació en 1999, cuando del Departamento de energía del Gobierno de Estados Unidos creó una competición en la que se convoca a universidades de todo el mundo para diseñar y construir viviendas que sean autosuficientes energéticamente, que funcionen sólo con energía solar, que estén conectadas a la red y que incorporen tecnología que permita su máxima eficiencia energética.
Los propósitos fundamentales del proyecto son los de concienciar al público general sobre las energías renovables, la eficiencia energética y las tecnologías disponibles para reducir el consumo; fomentar que las tecnologías solares se extiendan más rápidamente en el mercado; sensibilizar a los estudiantes que participan sobre las múltiples ventajas y posibilidades del uso de energías renovables y de construcciones eficientes energéticamente y demostrar de forma palpable que se puedan construir viviendas sin que la eficiencia energética sea un menoscabo alguno de sus prestaciones.
La fase final de la competición consiste en ensamblar las viviendas, constituyendo la denominada Villa Solar. Las universidades compiten por obtener la máxima puntuación total en diez pruebas:
- Arquitectura: se valoran las prestaciones arquitectónicas, la calidad del espacio y la funcionalidad del mismo.
- Ingeniería y construcción: se valoran las tipologías estructurales y constructivas y la eficiencia de las soluciones adoptadas.
- Instalaciones solares: se analiza la idoneidad del aprovechamiento solar y la instalaciones fotovoltaica y solar térmica, así como la eficiencia del conjunto de las instalaciones.
- Balance de energía eléctrica: comparación entre la energía eléctrica producida y consumida.
- Condiciones de confort: se tiene en cuenta el confort acústico, lumínico e higrotérmico.
- Equipamiento: se valora desde el punto de vista funcional y de los propios lectrodomésticos.
- Comunicación y sensibilización social: se valora cómo vende cada equipo su casa y cómo sensibiliza al público en los temas en torno a los que gira la competición.
- Industrialización y capacidad de mercado: se valoran las posibildades de industrialización de la casa para modelos más sostenibles.
- Innovación: se valora la capacidad de inovación que propone cada casa en todos los ámbitos.
- Sostenibilidad, con carátecer general.
En la edición del pasado mes de junio, se alzó con el primer permio, otorgado por un jurado internacional compuesto por arquitectos e ingenieros de reconocido prestigio, la casa Lumenhaus, proyecto realizado por la Virginia Polytechnic Institute & State University. Inspirada en la casa Farnsworth de Mies Van der Rohe, propone una configuración abierta que conecta a los habitantes de la casa con la naturaleza del exterior. Cuenta con un sistema de eficiencia energética Quantum de Lutron, que ofrece soluciones flexibles y escalables para el control total de la luz desde un único espacio hasta un edificio comercial completo, permitiendo un ahorro de dinero y energía al mismo tiempo que crea un ambiente confortable.
Lumenhaus, Virginia Polytechnic Institute & State University, Estados Unidos. Prototipo.
La Villa Solar, con los 17 prototipos de las unversidades participantes, recibió del 17 a 27 de junio, 190.000 visitantes.
Los proyectos de los equipos españoles de la Universidad CEU Cardenal Herrera y del Instituto de Arquitectura Avanzada de Cataluña (IAAC) obtuvieron ex-aequo el premio del público.
El IAAC lo hizo con la Fab Lab House, una casa, en palabras de su co-director Daniel Ibáñez, muy humana, que sirve para vivir y no tanto como un demostrator de tecnología, una casa íntegra, de nueva generación. Por su parte, Vicent Guallart, director del IAAC, valoró el gran paso que supone el proyecto en el impulso del espíritu de la innovación en el ámbito de la arquitectura y la construcción.