Un imponente volumen arquitectónico que busca ofrecer a sus inquilinos una experiencia única
En la isla de Yagaji, al norte de Okinawa, Japón, se alza Villa M, un suerte de refugio costero que combina arquitectura ciertos rasgos brutalistas y la indiscutible elegancia del minimalismo vernáculo. Diseñada por Suppose, la galardonada práctica nipona dirigida por Tanijiri Makoto, se trata de un imponente volumen arquitectónico que busca ofrecer a sus inquilinos una experiencia única.
Elevada sobre pilares para minimizar su impacto en el entorno, su estructura de hormigón visto equilibra la robustez del material con formas geométricas limpias y aireadas. Con capacidad para seis personas, Villa M se abre al paisaje costero, invitando a la contemplación y el descanso.









