De Baillat para Baillat. El reto de crear tu propia identidad

El nuevo diseño canadiense

Si bien todos lo proyectos, cualquiera sea su dimensión, son un reto creativo y profesional mayúsculo, convengamos que el desarrollo de una identidad para tu propio estudio es un caso aparte. Por esta y otras muchas razones, el rebranding realizado por la gente de Baillat, el estudio canadiense propiedad de Jean-Sébastien Baillat, es digno de celebrar.

La nueva identidad se organiza alrededor de un sistema tipográfico arrollador compuesto por dos familias tan distintas y atractivas como funcionales y efectivas. La estrella principal por supuesto es la Baillat Studio Stencil, una serie especialmente diseñada —y comercializada— por Coppers and Brasses, una interesante fundición digital con sede en Montreal, que destaca por su «homenaje» a los míticos tipos de plantilla. La segunda, robusta, de palo seco y mucho más sencilla, está destinada a textos y ciertos destacados, sirviendo al mismo tiempo como contrapunto en el paisaje general. «Esta nueva identidad también marca el comienzo de un nuevo período para el estudio, donde nuestra visión se redefine y nuestras ambiciones se renuevan», comenta Baillat.

La nota final es para el isotipo. Impecable. De construcción ligera, esta suerte de monograma nos sugiere una «B» y una «S» casi de forma subliminal. El peso y proporciones le permite también funcionar adecuadamente en contextos offline y online.