Una revista cultural con carácter
BCN Més es una revista independiente, trilingüe, de distribución mensual y especializada en la cultura local de Barcelona. Para el número 50, sus editores buscaban trasladar el carácter editorial de la revista; directo, divertido y algo provocativo, a su maquetación en papel. Además, la maqueta requería ser flexible. Capaz de acomodar grandes reportajes junto a columnas breves o tiras cómicas espontáneas, las cuales fueran móviles e intercambiables número a número. Los únicos requisitos estéticos fueron mantener el tamaño de la doble página y la impresión a dos tintas. Lena Wiget —la editora— y el diseñador Angel Sanz Correa, trabajaron mano a mano para estructurar el contenido con tal de conseguir el flujo de lectura óptimo.
El concepto
El objetivo central del diseño fue establecer una nueva identidad editorial que a su vez sirviera como herramienta para separar e ilustrar las diferentes secciones del contenido. Dado que el periódico es trilingüe, se escogieron tres grosores de trazo: El trazado más fino se usaría como divisor de subsecciones, como subrayado en notas breves y como el trazo de iconos muy pequeños. El mediano se usaría como divisor de secciones completas, como subrayado de citas o como el trazo de los iconos principales. Finalmente, el trazo grueso se usaría como separador entre bloques grandes dentro de una doble página, como subrayado de palabras importantes.
La tipografía
Después de los trazos, la tipografía se utilizaría como segundo pilar de la identidad del proyecto. Se eligió para ello a la GT Sectra, una familia egipcia con mucha personalidad; perfectamente apropiada para el contenido de la revista. Sus cortes caligráficos angulares dictarían el aspecto con el que se diseñaría toda la revista: las cajas de las secciones y sus divisiones quedarían sesgadas, igual que los trazos de los iconos. Asimismo, ese mismo enfoque asimétrico se aplicaría al nuevo logo de la cabecera, en el cual la tilde de la palabra Més pondría en primer plano el concepto de la identidad, atando así el estilo de todo el proyecto editorial. Se usaría una familia tipográfica para contenido secundario, una fuente de palo seco que contrastara con los textos principales. La escogida fue la Aperçu, que pese a su sencillez comunica frescura con sus puntos gruesos y sus formas redondeadas.
La maquetación
Continuando con el concepto de tres grupos, la maqueta está compuesta de tres columnas centrales por página para el contenido, además de una columna extra en el eje de la página en la que situar los anuncios de los puntos suscriptores. Finalmente, dado que cada número tenía que imprimirse en un color concreto (a parte del negro, que se reservaba para los textos con tal de evitar problemas de registro), escogimos un tono mensual que se ajustara a la atmósfera cromática propia de esa época del año.