Cortar y pegar a la vieja usanza
El collage, como muchas otras técnicas, ha visto una segunda vida en el universo digital, revitalizada y mejorada por una abanico casi interminable de herramientas que facilitan una labor artesanal que hoy se antoja innecesaria. Pues creativos como Ashkan Honarvar no solo se resisten a las mieles de la informática sino que sacan partido de una práctica que se creía extinta.
Nacido en Shiraz, al sureste de Iran, Ashkan Honarvar llegó a los Países Bajos huyendo de la guerra que enfrentaba su país natal con el Irak de Saddam Hussein. Graduado en Comunicación Visual por la Universidad de Bellas Artes de Utrecht, Honarvar ha vertebrado su obra en temas tan complejos como la política, el genocidio y como no, la guerra. Con decenas de colecciones compuestas por piezas únicas e irrepetibles, este creativo iraní actualmente radicado en Noruega, ha construido un ecosistema artístico solido que lo ha llevado a exponer en países tan dispares como Alemania, Costa Rica, Bélgica, Estados Unidos, Polonia o Argentina, solo por nombrar algunos.
La obra de Honarvar ha ido evolucionado a lo largo de la última década pero siempre explorando los aspectos más controvertidos de la sociedad en que vivimos y expresándolo a través de un lenguaje en clave surrealista.