“No podemos imaginar qué va a hacer la gente con las colecciones. Estamos preparados para sorprendernos”.
Conseguir la imagen indicada, en la resolución correcta, es siempre un dolor de cabeza. El éxito de un proyecto, cualquiera sea su envergadura, a menudo depende en gran medida de esta variable y más aún, si el presupuesto es corto o inexistente. Por esta razón, cuando instituciones como el Smithsonian, probablemente la organización cultural más importante y longeva de Estados Unidos y una de las más famosas del mundo, decide liberar su fondo gráfico digitalizado compuesto por más de 3 millones de imágenes, es de agradecer.
Efectivamente, Smithsonian Open Access, como ha sido bautizada la iniciativa, busca fortalecer la inestimable labor de difusión y promoción de la cultura americana y universal que lleva haciendo la institución desde hace 175 años.
El banco de imágenes abarca archivos 2D y 3D, y se pueden encontrar desde la Olivetti que utilizaba la escritora Octavia Butler, el casco protector de Muhammad Ali, o la silla Peacock de Frank Lloyd Wright, hasta un boceto del Salon d’Angle, de Gilles-Marie Oppenord, o la portada de The Negro Motorist Green-Book, el infame libro de Victor Hugo Green. “No podemos imaginar qué va a hacer la gente con las colecciones. Estamos preparados para sorprendernos”, comenta Effie Kapsalis, Directora de Contenido del Smithsonian.
En definitiva, ya sea para los profesionales del diseño o los amantes de la cultura, el Smithsonian Open Access es una buena noticia en toda regla. Por cierto, aquí os va el enlace.