Y la siempre difícil tarea de contentar a todo el mundo
Y aunque existen diferentes grados de complejidad, todos los proyectos son, sin importar su dimensión, un verdadero reto creativo. Ahora bien, para que una regla se cumpla como tal, ha de haber siempre una excepción y, en este caso, es la de diseñar para diseñadores. Efectivamente, este tipo de trabajos conllevan un componente intangible, una presión añadida si se quiere, la cual consigue hacer dudar hasta a el creativo más experimentado pero, de jugarse bien las cartas, el resultado suele ser tan inspirador como aleccionador. Este es el caso del rediseño de identidad que el estudio londinense OPX ha completado para una de las organizaciones consagradas a la promoción del diseño más antiguas y valoradas del Reino Unido, por supuesto estamos hablando de Design Council.
Con el objetivo expreso de reflejar de forma «moderna y fresca» los valores y razón de ser de Design Council, que nunca ha sido otro que la de mejorar la vida de las personas, comunidades, empresas y el planeta, mediante el diseño, el equipo a cargo del proyecto, con su fundadora Frances Jackson a la cabeza, se entregó a la tarea de encontrar la medida justa de todo.
Ya en la mesa de trabajo se optó por simplificarlo todo. La primera medida fue la de mantener el característico rojo corporativo como elemento de fuerza, pero ofreciendo a la ampliada paleta secundaria más protagonismo. Dicho esto, el gran beneficiado es el blanco: una decisión que responde a la necesidad de «dar aire» a las composiciones. «Promovimos los espacios en blanco y dejamos el rojo para los lugares cruciales», comentan desde OPX.
Sobre este diáfano escenario el ecosistema tipográfico, liderado por Helvetica Neue de Miedinger, consigue dar lo mejor sí. El tercer y último pilar de la propuesta de Jackson y los suyos son las imágenes, cuidadosamente seleccionadas y tratadas, representan sin obviedades «todas y cada una de las disciplinas del diseño, así como las comunidades y la industria del Reino Unido».
La nota final es para el diseño de un video promocional con aires de corto, concebido en torno a una sola pregunta: Qué entendemos por diseño. La repuesta se desarrolla y fluye con gracia a los largo de 90 segundos. «Se ha convertido en la pieza de comunicación insignia de Design Council».