De vinos y de antiguos griegos
Backbone, el estudio armenio especializado en branding fundado en 2010 por Stepan Azaryan, ha desarrollado un espectacular proyecto de packaging para una marca de vinos de la casa, de índole privada, cuya argumentación, conceptualización y finalmente, excelsa ejecución, lo convierten en verdadero case study.
Φ i l o s o Φ (philosoph, pero utilizando la leta fi (Φ) del alfabeto griego), como ha sido bautizada la línea, se construye a partir de la popularmente conocida relación entre el vino y los habitantes de la Antigua Grecia, en concreto, de aquellos proclives a una vida más intelectual. «El vino ha sido un compañero imprescindible de los grandes pensadores y filósofos. De hecho, ‘simposio’ era el nombre de las reuniones donde los filósofos de la Antigua Grecia tenían largas y profundas discusiones alimentadas por el consumo de generosas cantidades de vino. Por eso, para esta nueva marca de vino, quisimos evocar el concepto de ‘pensamiento profundo’ encarnado por la persona de un filósofo. Esta es una invitación para que el consumidor contemporáneo de vino emprenda un viaje al pensamiento», comenta Azaryan.
A partir de este punto, con las ideas claras de lo que se pretendía y más importante aún, de cómo lograrlo, la gente de Backbone se puso manos a la obra. Un envase de cerámica de líneas rústicas, inspirada en las antiguas ánforas helenas, a dos colores y con la marca en bajorrelieve, es el corazón de una propuesta simplemente brutal.
Este logrado recipiente (que culmina con un tapón plano decorado con unos copies a la altura), está literalmente envuelto en un pliego de papel texturizado en el que Mariam Stepanyan, ha retratado el rostro de un hombre, inspirándose en las antiguas esculturas griegas. Se trata de una imponente imagen que ya sea por los detalles en dorado (especialmente los ojos) o por los juegos tipográficos, se consigue el efecto deseado de solemnidad, sofisticación y atemporalidad.
La nota final es para el video animación realizado para la presentación del proyecto: un minuto pocas veces cundió tanto. Felicidades.