Seachange le cambia la cara a un servicio privado de recolección de basura en Auckland

Apuesta todo al rosa y acierta de lleno

Seachange, el estudio australiano dirigido por Amanda Gaskin y Tim Donaldson, firma un fantástico trabajo en el que, con valor y mucho talento, se ha conseguido generar un cambio radical en una linea de negocio poco habituada estéticas heterodoxas.

El cliente, Supertrash, un servicio privado de recolección selectiva de residuos que opera en la ciudad neozelandesa de Auckland, buscaba dar un golpe de efecto en su nicho de mercado y decidió ponerse en manos de Seachange, todo un acierto.

Lo primero que hay que destacar del nuevo sistema es sin lugar a dudas, la paleta. Escueta a más no poder y liderada por un furibundo rosa flúor, todo, absolutamente todo está marcado por el uso y abuso de este color.

Hipotecados con esta decisión, se optó por formas simples y robustas, que potenciaran los contrastes y que, a su manera, permitiera la introducción de espacios negativos y «aire».

La nota final es para el logotipo. Vamos a ver, fuera de este contexto gráfico, podríamos llegar a pensar de que se trata de una pieza creada por un aprendiz pero, su ingeniosa seudotridimensionalidad aporta al sistema un balance y profundidad agradable a la vista.