«Los tipos de código abierto permiten a diseñadores noveles hacer cosas nuevas más rápido, construyendo sobre una base sólida en lugar de hacer todo desde cero».
Aunque en Internet es posible encontrar cientos de tipografías de descarga gratuita, su calidad no siempre es la óptima, o al menos no la necesaria para afrontar y soportar el peso y exigencias de un proyecto serio. En este sentido, The League of Movable Type, la primera fundición tipográfica de código abierto del mundo, se presenta como una opción real y válida a la hora de elegir nuestra fuente ideal sin coste.
Esta iniciativa, obra de Micah Rich, un diseñador estadounidense especializado en desarrollo y soluciones digitales que ha trabajado para empresas como NBC, The New York Times o Mozilla, no ha parado de crecer desde su fundación. «Recolectamos algunas fuentes de nuestros archivos, de antiguos compañeros de clase y de anónimos en Internet que creían en nuestra misión, lanzamos el sitio y hemos estado trabajando desde entonces para mostrarle al mundo que los tipos de código abierto son beneficiosos para todos», comenta Rich.
Aunque su catálogo actual consta de solo 17 fuentes (enfocadas mayormente a medios digitales), se trata de un número engañoso. La variedad y el hecho de que todos los tipos pueden ser modificados y customizados a placer del usuario, lo cambia todo. «Los tipos de código abierto permiten a diseñadores noveles hacer cosas nuevas más rápido, construyendo sobre una base sólida en lugar de hacer todo desde cero».
Por último y no menos importante está, como comenta Rich, el «elefante en la habitación», haciendo referencia a conflicto que se genera entre su iniciativa y las empresas y diseñadores que viven de la creación y venta de fuentes tipográficas. «Esta revolución no es un movimiento contra las fundiciones y diseñadores de tipos; todo lo contrario. Hacemos lo posible para promover a los diseñadores que han contribuido con nuestro catálogo. No siempre se trata de dinero, a veces también se trata de hacer una contribución a la sociedad y, en este caso, a la comunidad de diseño».