«Las sillas para niños a menudo se abandonan después de que estos crecen. La idea era crear una pieza estéticamente agradable que funcionase incluso después de haber agotado su vida útil para los mas pequeños».
El diseñador industrial canadiense Alan Hung, fundador de Way Object, presenta Kidarc, una colección de asientos para niños cuya ingeniosa arquitectura le permite funcionar —en una sola maniobra— como mesa auxiliar o taburete bajo para adultos. «Las sillas para niños a menudo se abandonan después de que estos crecen. La idea era crear una pieza estéticamente agradable que funcionase incluso después de haber agotado su vida útil para los mas pequeños», comenta Hung. Aún sin contrato de producción, las Kidarc están pensadas en madera contrachapada y textiles varios.