Cada año se tiran millones de botellas de plástico en todo el mundo. Para luchar contra tan alto nivel de contaminación ambiental, la empresa de diseño londinense BU ha creado BU Water, una botella individual y reutilizable que, además, filtra el agua mediante un dispositivo de carbón vegetal que elimina las sustancias químicas del agua del grifo. A diferencia de muchos de los filtros de agua que hay en el mercado, en este caso no se hace uso de resinas artificiales para proporcionarle su forma final. El filtro, siguiendo métodos tradicionales japoneses, está hecho de bambú, y es sometido a un proceso de carbonización. Mediante este proceso se abren millones de pequeños poros en la estructura del bambú, creando así una enorme superficie de carbón activado con infinidad de puntos de unión. Los productos químicos del agua son atraídos por estos puntos y quedan atrapados en ellos. De este modo, sustancias como el cloro o incluso los malos olores son absorbidos por el filtro, a la que vez que minerales como el potasio y el magnesio son liberados en el agua, proporcionándole un sabor fresco. La botella, con un cuidado diseño, tiene una capacidad de 700 mililitros y está hecha de Tritán, un tipo de plástico libre de BPA, y una gran alternativa al vidrio por ser más ligero a la vez que resistente. El tapón, al igual que el filtro, también es de bambú, la planta que más rápido crece y se regenera en el planeta.