Diseño sostenible: alumnos del IED Barcelona proponen soluciones reales, coherentes y de valor

Sostenibilidad: el diseño como motor del cambio

Las complejas circunstancias que dan forma a nuestra realidad social, económica y cultural tienen en jaque a un ecosistema planetario que se debilita día a día. La tragedia del plástico, la polución ambiental, la deforestación o la sobrepoblación humana, son algunos de los elementos que conforman uno de los escenarios más desafiantes para la humanidad. 

Palabras como sostenibilidad, reciclaje, biodegradable, reutilización… han dejado de ser mero atrezzo de discursos políticamente correctos para incorporarse al lenguaje creativo y constructivo del diseño de vanguardia. 

Pero ante una situación de tales dimensiones, no basta con la buena voluntad de iniciativas aisladas, es imprescindible atacar el problema desde la raíz, y es aquí donde el mundo académico juegan un papel vital: formar a los diseñadores desde un replanteamiento integral. Las instituciones educativas que apuestan por el diseño como vector de cambio, han aceptado el reto mayúsculo de potenciar la creatividad con conciencia.

El diseño sostenible, el diseño verde, el diseño consciente, es una nueva forma de pensar, de crear, de trabajar. Se trata de una implicación activa en todos y cada uno de los procesos que afectan a un proyecto, desde la investigación y el desarrollo creativo, pasando por la elección de materiales y el lugar de fabricación, hasta las pruebas del producto y su destino final una vez obsoleto. Estas son apenas algunas de las variables a las que el nuevo diseñador debe estar atento.

En este artículo recogemos tres proyectos de alumnos del IED Barcelona Escuela Superior de Diseño, que se ajustan a los valores del diseño sostenible y aportan, cada uno desde su área de competencia, soluciones sostenibles, reales, coherentes y de valor.

Pan pel, packaging biodegradable de Camila Morandi

Pan pel es un proyecto desarrollado por Camila Morandi, alumna del Título Superior en Diseño de Interiores. Se trata de un packaging biodegradable y 100% ecológico realizado a partir de papel kraft reciclado, sobras de pan rallado, agua y agar agar, un alga con una capacidad espesante 50 veces mayor que la gelatina.  

El proyecto es fruto de un workshop multidisciplinar llevado a cabo por el IED Barcelona. Los alumnos participantes ahondaron en el concepto de Food Design System desde un enfoque holístico y global a partir del pan, entendido más como objeto y producto, que como alimento. Partiendo de una primera reflexión sobre los elementos básicos del pan, su ciclo de vida (desde la semilla hasta el deshecho) y su valor cultural, Pan Pel subraya el uso de los alimentos como materiales, una propuesta poco explorada en el campo de la formación en diseño.

Organic Sling Bar, las perchas biodegradables de Josep Bastida  

El alumno del Título Superior en Diseño de Producto, Josep Bastida, propone un juego de perchas producido a partir de agar agar y de fibras de algodón reciclado, que por ser demasiado cortas no pueden generar un tejido de calidad. Este material puede reciclarse tantas veces como sea necesario. Mediante la aplicación de agua caliente y más agar agar se puede volver a moldear la pieza, en caso de rotura o adaptación a nuevas necesidades. El residuo generado al crear las piezas es solo agua, que se elimina en forma de vapor fácilmente y sin contaminación. Su proceso de producción es simple y requiere de pocos materiales.  

SantMercat, colección de prendas de vestir de Anna Masclans   

SantMercat es una colección de moda que reflexiona sobre la sostenibilidad, teniendo en cuenta la eficiencia del uso de recursos y la trazabilidad de materiales enfocados a la industria de recuperación y reciclaje. La propuesta de la alumna del Título Superior en Diseño de Moda, Anna Masclans, parte de una profunda investigación sobre el ciclo de vida de las prendas apostando por la economía circular, desde la concepción de la idea hasta el fin de vida del producto. SantMercat busca provocar una reflexión sobre la industria de la moda y la alimentaria, dos de las más contaminantes del planeta, así como llamar la atención sobre la responsabilidad de los diseñadores en el desarrollo de procesos. La colección va acompañada de una pieza audiovisual, ganadora del Premio Isabel Coixet al mejor Fashion Film de Fashioners of The World 2018, desfile organizado por el IED Barcelona.