El diseño industrial francés está viviendo uno de sus mejores momentos: además de los “veteranos”, existe un rico panorama de creativos jóvenes e innovadores. Entre ellos, destaca Ionna Vautrin, cuyo trabajo está alcanzando reconocimiento internacional, entre otros, gracias a sus creaciones para la firma francesa Lexon: la colección Mezzo –compuesta por tres pequeños objetos de plástico (una radio, un despertador y una linterna)– y el bolígrafo Reed.
Colección Mezzo y bolígrafo Reed, Ionna Vautrin para Lexon, 2013-2014.
La diseñadora bretona Ionna Vautrin se licencia en 2002 en la escuela de diseño Nantes Atlantique. A partir de entonces, acumula experiencia trabajando en importantes centros creativos, como en el estudio de George J. Sowden o en el de los hermanos Bouroullec. Paralelamente, colabora con algunos proyectos personales con distintas editoras, como Industreal o ToolsGalerie y, sucesivamente, Moustache, Kvadrat o Super-ette.
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El encuentro, en 2010, con Foscarini –del cual nacen las lámparas Binic (con la cual gana el Wallpaper Design Award de 2011), Chouchin y Doll–, representa un punto de inflexión en su trayectoria profesional. En ese mismo año, llega el Grand Prix de la Création de la ciudad de París, tras el cual decide abrir en la capital francesa su propio estudio.
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Inspirada por los trabajos de maestros como Ettore Sottsass, Enzo Mari o Hector Guimard, Ionna Vautrin diseña objetos intuitivos, sencillos y disfrutables en la cotidianidad; especialmente, dispositivos de iluminación, muebles y accesorios del hogar.
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Más allá de la funcionalidad, sus diseños sorprenden por su capacidad evocativa y su personalidad. Como en el caso de las lámparas Chouchin, que sugieren formas de tradición oriental, cada objeto encierra una historia e invita, tal y como declara la propia diseñadora, a una múltiple interpretación. En sus proyectos, además, el color adquiere una importancia fundamental, hasta tal punto que puede marcar la elección del propio material.
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En cuanto a los tres productos de la colección Mezzo –creada en continuo diálogo con René Adda, fundador de Lexon– la elección del plástico (un material económico y fácilmente manipulable) responde, en efecto, a la exigencia de ofrecer una variedad cromática y de crear formas suaves y al mismo tiempo precisas..jpg "Ionna Vautrin Lexon")
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El primer artículo de la serie es una radio de pequeñas dimensiones, forma sencilla y funcionamiento intuitivo. Su parecido con los antiguos transistores le da un toque arquetípico, debido también a la larga antena y a la reja de cobre que, además, garantizan una buena calidad de recepción y sonido. La radio Mezzo se distribuye en cinco colores: azul, gris, verde, marrón y rojo.
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El reloj despertador Mezzo es una pequeña alarma analógica producida en cuatro colores (azul, gris, verde y rojo). Manejable y funcional (se puede parar o reactivar con un simple roce), gracias a sus manecillas luminosas representa un pequeño faro en la oscuridad..jpg "Ionna Vautrin Lexon")
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La luminaria Mezzo –el último artículo de la colección, de 2014– es una linterna led recargable por USB y disponible en los mismos cuatro colores del reloj despertador. Su forma se inspira en los antiguos flashes de las cámaras fotográficas. Cómodamente apoyable en una superficie plana, la linterna produce una luz potente y de intensidad variable.
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Reed, finalmente, es a la vez un tradicional bolígrafo retráctil y una pluma para tabletas. Su diseño se distingue por la esbeltez y –gracias a la forma redondeada y flexible de la goma colocada en su extremidad superior– por la originalidad. También de 2014, la última creación de Ionna Vautrin para Lexon confirma el éxito de la colaboración entre la joven diseñadora francesa y uno de los referentes internacionales en el ámbito del diseño industrial.
