Las líneas distintivas del diseño nórdico con la fortaleza tecnológica asiática
Si bien el mercado de ciertos productos se ha visto deprimido a causa de la actual crisis sanitaria, otros en cambio, han sido favorecidos ostensiblemente. Este es el caso de los purificadores de aire. El aislamiento y restricciones sociales han empujado a sociedades enteras ha pasar más tiempo en sus casas y el aire puro no siempre puede obtenerse abriendo las ventanas, especialmente en las grandes urbes.
Conscientes de este excepcional contexto y especialmente de la falta de opciones en este tipo de producto, el estudio surcoreano, Komma, ha desarrollado un atractivo dispositivo que aúna las líneas distintivas del diseño nórdico con la fortaleza tecnológica asiática. Se trata de Löv, un purificador de aire para el hogar capaz de tratar una habitación media en algo más de 10 minutos.
Sus dimensiones (44,5 x 35,4. x 0,86 cm), su eficiencia (están provistos de filtros HEPA), su apariencia austera y por sobre todo, sus opciones de pie y aplique de pared, lo convierte en un dispositivo versátil que puede ser utilizado también en oficinas de dimensiones reducidas y/o poco tránsito. «Nos inspiramos en la naturaleza, específicamente en el bosque. A partir de ahí nos dedicamos a reunir material e ideas de reconocidos maestros del diseño de muebles y de la arquitectura. Queríamos ir más allá de un simple filtro de aire, queríamos hacer algo inspirador», comentan desde Komma.