El diseñador Davide Groppi define Nulla como un trabajo de simplificación extrema; de este modo, la máxima reducción de la fuente de luz –que parece ser inexistente–, hace de ella una pieza sólo visible por su función, la de iluminar.
Nulla, Davide Groppi, 2010.
Como indica su nombre –nada–, la pieza está ausente, de modo que únicamente existe la luz como expresión de un fenómeno físico, alejado de la materialidad. Gracias a un orificio de 8 milímetros en el techo y un sistema de tecnología led proporciona una iluminación focalizada, creando una atmósfera ilusoria y mágica.
Nulla, Davide Groppi, 2010.