El estudio madrileño Kawamura-Ganjavian presenta Ostrich, una almohada-capucha que proporciona un lugar de descanso portátil y aísla nuestros sentidos del mundo exterior, de la misma manera que las avestruces esconden su cabeza bajo tierra.
Ostrich, Kawamura-Ganjavian, 2011.
Ostrich es un curioso objeto difícil de definir: mezcla de cojín, capucha y prenda de vestir, el producto consiste en un cuerpo gajoso del que nace un cuello alargado y estrecho por donde introducir la cabeza, y dos pequeños orificios laterales en los cuales alojar las manos.
“Cada vez empleamos más tiempo en nuestro lugar de trabajo, lo que a su vez significa que a menudo necesitamos hacer compatibles en un mismo ambiente el trabajo y el descanso”. El resultado de esta reflexión es una especie de gran caperuza que aísla de ruidos a la vez que crea un espacio cálido mientras descansamos nuestra cabeza sobre la mesa de la oficina. Kawamura-Ganjavian se inspira en el comportamiento de las avestruces que esconden su cabeza en el suelo.
Ostrich, Kawamura-Ganjavian, 2011.
Kawamura-Ganjavian es un estudio madrileño de arquitectura y diseño formado en el año 2000 por Key Portilla-Kawamura y Ali Ganjavian, fundadores del Studio Banana. La biomimética o imitación de la naturaleza destaca entre los principios que vertebran su trabajo, como demuestra Oyster, un sillón que se despliega de la misma manera que una ostra, o Giraffe, un módulo de división de espacios cuya estructura recuerda la forma del animal del mismo nombre.