Yukihiro Kaneuchi ha diseñado Sand Vases, una colección de jarrones fabricados, entre otros materiales, con arena de playa. Con ella, el diseñador japonés quiere explorar el origen tipológico del jarrón, a partir de estructuras que se inspiran en las tradiciones religiosas niponas.
Sand vases, Yukihiro Kaneuchi, 2012.
La serie de jarrones Sand Vases, fabricados a partir de un compuesto de arena de playa, resina, cristal y corcho, está formada por cuatro piezas diferentes, cuyo punto de partida formal se encuentra en el cono. La superficie lisa, la estilización de las formas y la sencillez geométrica definen un objeto elegante, al mismo tiempo que radical y elemental.
El aspecto formal de los jarrones se inspira en el Bou-Taoshi, un deporte infantil japonés en el que dos equipos luchan por capturar una rama hincada en una duna de arena. Según parece, éste juego se inspira, a su vez, en los montículos cónicos que, en las inmediaciones de algunos templos nipones, se disponen para representar a la divinidad y en las montañas de arena que se utilizan en Japón para oficiar las ceremonias que celebran la colocación de la piedra angular de una construcción.
"En su forma actual, los niños no son conscientes de este patrimonio ni de que están creando un objeto que representa al espíritu divino y completa la ceremonia de purificación de las obras en construcción", explica Kaneuchi, quien ha querido transpolar todas estas tradiciones en esta colección, con el fin de exteriorizar una relación a menudo oculta y desconocida, incluso, para los propios japoneses.