150 m2 de buen gusto
La práctica de arquitectura rusa, Archpoint, fundada en 1998 por Valery Lizunov, firma el diseño de interior de Rebecca, un espectacular café cuya puesta en escena, austera, honesta y elegante, ha enriquecido el legado arquitectónico del distrito moscovita de Khamovniki, famoso por su gran oferta gastronómica.
«Al entrar a Rebecca uno espera ver un interior minimalista con superficies brillantes, pero en cambio se encuentra en una atmósfera inesperadamente acogedora, encarnada entre techos altos y paredes de concreto», comentan responsables del proyecto.
Efectivamente, si bien en los papeles se podría decir que Rebecca respira minimalismo, lo cierto es que el resultado es otro completamente distinto. Esta calidez e indescriptible familiaridad en parte se debe a la sabia elección de la paleta de colores y en particular, del mobiliario. «Sillas y sillones vintage restaurados de diferentes formas y tipos, como si fueran comprados en un mercado de pulgas en Europa, le dan al salón un encanto especial de comodidad hogareña. Dos opciones clásicas de asientos están disponibles para los huéspedes: en sillas en las mesas o en un largo sofá suave de color gris claro a lo largo de la pared.
Destaca especialmente la optimización e la luz natural y el uso de espejos y transparencias para potenciar sus efectos. «Durante el día, la luz entra a través de las grandes ventanas de piso a techo, y por la noche se crea una atmósfera de cámara: la iluminación de acento se enciende sobre las mesas, debajo de las cuales la comida y el vino en copas tintineantes adquieren un sabor particularmente rico».