Una sonrisa valenciana
Seguidores durante años del trabajo de la consultora creativa Masquespacio a través de las redes sociales, Alberto y Maite decidieron contactar con el ellos para encargarles la reforma de su clínica dental, Somriures. Situado en L’Alcudia, un pequeño pueblo a poco más de 30 kilómetros de Valencia, el nuevo local hace honor a su nombre, «sonrisas» en valenciano. Especializado en la creación de «sonrisas bonitas», el estudio dental es colonizado por una escultura de 2884 listones de madera. Colgada del techo con el fin de recrear una sonrisa, ésta invade algunas de las paredes, guiando al cliente a través del espacio. Los diseñadores han optado por colores suaves como el verde turquesa y el blanco, con detalles en dorado, marrón y azul oscuro que añaden un contraste sofisticado al espacio. El concepto de «sonrisa bonita» se traslada también al mobiliario, hecho a medida a partir formas orgánicas.
El proyecto ha supuesto un reto para Masquespacio, especializado hasta ahora en otro tipo de espacios, de hostelería, hotelería y retail. «En lugar de entrar tanto en el detalle como en otros proyectos, la tipología de esta intervención nos empujó a buscar una imagen general seria y sofisticada, con el mínimo número de materiales«, explican sus fundadores, Ana Milena Hernández Palacios y Christophe Penasse. Un condicionante a partir del cual los diseñadores han creado un local centrado sobre todo en tres elementos: una escultura que recrea una sonrisa, los colores verde turquesa y blanco, en referencia a la limpieza e higiene, y un mobiliario de formas orgánicas.