Veinte proyectos internacionales de arquitectos y artistas se exhiben en el MoMA de julio a octubre de 2014: maquetas a gran escala, vídeos, dibujos, fotografías e, incluso, una instalación que ocupa toda una sala, muestran cómo el espacio sigue siendo el punto de mira desde el que la arquitectura contemporánea inspira sus creaciones. Los participantes componen una visión global de la práctica arquitectónica de nuestra época, entre quienes destacan las obras de Herzog & de Meuron, Álvaro Siza y Kengo Kuma, y se abren camino proyectos como los del joven chileno Pezo von Ellrichshausen, del japonés Ryue Nishizawa, del Ensamble Studio español, y del New York – based SO-IL y MOS Architects.
National Stadium de Pekín (China), Herzog & De Meuron, 2008. Fotografía de Iwan Baan.
El espacio que separa dos cuerpos es infinito hasta que el hombre no le da el nombre de una medida. En la tierra los humanos cortan el espacio temporalmente pues su morar implica movimiento: a cada paso, el espacio se desplaza para recomponerse justo detrás del caminante. Con los objetos ocurre algo diferente. Edificar significa fijar: echar cemento sobre una superficie que, siempre y cuando el edificio sobreviva, permanecerá ocupada. Y entonces, al espacio no le queda más remedio que colarse por las ventanas y puertas, y conformarse con el nombre de “interior”.
Jakub Szczesny, Keret House, Varsovia (Polonia)
La arquitectura se sirve del espacio de múltiples formas, siendo la variedad de diseños reflejo de la mirada de cada arquitecto y, a su vez, las ciudades y edificios expresión de las preocupaciones e ideas de cada época. La arquitectura racionalista es un ejemplo de cómo el espacio es moldeado desde una perspectiva social: los edificios debían ser la mínima expresión en la que un hombre podía vivir.
Marjetica Potrc, Struggle for Spatial Justice, 2005–2007.
Los dibujos de la eslovena Marjetica Potrc o la fotografía del chileno Cristobal Palma muestran cómo se distribuyen los recursos espaciales en diferentes urbanizaciones, así como las desigualdades socioeconómicas que dichas diferencias provocan. En este sentido, la exposición Conceptions of Space que tiene lugar en el MoMA desde julio hasta octubre de 2014, ofrece miradas de crítica o sarcasmo hacia la arquitectura y no se limita únicamente a ensalzar la grandeza de sus obras.
Michael Maltzan, Pittman Dowell Residence, La Crescenta (California), 2009.
Los estilos de vida también condicionan los diseños expuestos. Cada apartamento necesita de dormitorios, cocina, baño y sala de estar, pero ello no impide que los arquitectos puedan experimentar con el espacio y crear casas atípicas. El arquitecto de Los Ángeles, Michael Maltzan, transforma la clásica villa con patio interior en un bucle de espacios interconectados; mientras la firma chilena Pezo von Ellrichshausen recrea la conexión entre espacios de vivienda y trabajo en una pequeña torre de habitaciones individuales dispuestas en vertical.
Perspectiva aérea. Daniel Grataloup, Propuesta urbana, 1970.
Boceto. Kengo Kuma, GC Prostho Museum Research Center, Kasugai, Aichi (Japón), 2010.
Si el “arte por el arte” es lo que mueve al arquitecto entonces nos toparemos con el artista que sortea restricciones urbanísticas y encaja sus artificios en espacios naturales, donde la arquitectura moderna pareciera una creación de la naturaleza. La creatividad del arquitecto se exhibe, aquí, ensamblando volúmenes de todo tipo a formas arriesgadas: materiales y objetos destinados, en principio, a otro uso, son ahora el centro de una inusual composición arquitectónica. Tales son los ejemplos de la Iberé Camargo Foundation de Álvaro Siza, en Porto Alegre o de la maqueta del japonés Kengo Kuma.
Maqueta. Ada Tolla y Giuseppe Lignano, APAP OpenSchool, Anyang (Korea), 2010.
Esta exposición explora hasta el límite en el que el artista deja de ser arquitecto y empieza a ejercer de soñador, cuando sus ilusiones tienen la imagen de castillos de arena en el aire, de casas-fábrica de oxígeno, de naves espaciales. Inspirados en las architectural promenades de Le Corbusier, la ficción sirve de herramienta al diseño contemporáneo. Los escenarios futuristas propuestos por el suizo Daniel Grataloup y el americano Douglas Darden son asombrosos ejemplos de ello. Y para concluir, la performance, queda garantizada. ¿Cómo excluir al sujeto que hace que los objetos devengan tales? Los hombres a partir de ahora podrán fijar los objetos a su antojo, componer su propio espacio vital gracias a invenciones como el White Elephant de Jimenez Lai.
Audiovisual, Hilary Sample y Michael Meredith.The Romance of Systems, Museum of Outdoor Arts Element House (Las Vegas), 2010.