Evitar la contaminación del océano es una prioridad del siglo XXI. Ocean Sole, The Flipflop Recycling Company, lo sabe. Por eso, el proyecto de esta compañía consiste en recuperar los deshechos con los que la población keniana ensucia las playas y convertirlos en ingeniosos objetos de artesanía, dando trabajo a los locales y liberando al mar de la muerte.
Al mar se arrojan muchos de los deshechos de los que el hombre se quiere desprender. Si en el pasado las aguas residuales eran asimiladas sin trastornar el ecosistema marítimo, a día de hoy un océano no basta para depurar las cantidades ingentes de sustancias químicas artificiales que producen la población mundial, la industria y la agricultura. La contaminación del océano destruye el hábitat marino, algas, moluscos y plancton, y pone en peligro a sus animales.
Ocean Sole, The Flipflop Recycling Company, 2014.
El proyecto Ocean Sole, The Flipflop Recycling Company se desarrolla en las costas del mar Índico. En 1997 la conservacionista marina Jeanne Church, conmocionada por las filas de escombros abandonados en las playas, propuso a las mujeres de las Islas Kiwayu (Kenia) recoger las chanclas de dedo (flipflops) junto a las telas metálicas desperdiciadas, reciclarlas y transformarlas en objetos de colores.
Ocean Sole, The Flipflop Recycling Company, 2014.
Ocean Sole, The Flipflop Recycling Company, 2014.
Actualmente, Ocean Sole, con sede en Nairobi, es una robusta empresa que se distribuye a lo largo de la costa de Kenia. Desde una perspectiva social, Ocean Sole, mejora la economía comunitaria al ser fuente de ingresos y trabajo para artesanos locales, mientras que desde un punto de vista ecológico, el proyecto contribuye a mantener el océano libre de plásticos y protege su vida marina.
Ocean Sole, The Flipflop Recycling Company, 2014.
Ocean Sole, The Flipflop Recycling Company, 2014.
Ocean Sole, The Flipflop Recycling Company, 2014.
Cada producto de Ocean Sole ha sido manufacturado en África a partir de materiales reciclados. Son, en gran parte, chanclas de plástico talladas que envuelven tela metálica y dan forma a estatuas de animales marinos, americanos y africanos, así como a souvenirs ecosolidarios.
Ocean Sole, The Flipflop Recycling Company, 2014.
Ocean Sole, The Flipflop Recycling Company, 2014.
Ocean Sole, The Flipflop Recycling Company, 2014.
Ocean Sole se ha granjeado fama internacional con proyectos como la Mfalme the Whale, del escultor keniano Kioko Mutiki en colaboración con la World Society of Protection of Animals y la World Coastal and Marine Secretariat; o con la presentación de Twiga the Giraffe en la Fashion Week de Roma; además de por haber recibido premios como el National Award for Kenia en el Energy Global Award en 2010. Recientemente, ha sido fundada la Ocean Sole Foundation, cuyo objetivo es crear conciencia acerca de la contaminación marina, aportar soluciones y educar a través del ingenio y la creatividad del reciclaje en proyectos artísticos.
Ocean Sole, The Flipflop Recycling Company, Marine Enviromental Day, 2006.
Ocean Sole, The Flipflop Recycling Company, Twiga the Giraffe, 2008.
El pasado 21 de Septiembre, 300.000 personas salieron a las calles de Nueva York en lucha contra el calentamiento global, pues se prevé que para 2015 las emisiones de gases de efecto invernadero aumenten en un 2.3%. Se podría decir que no existen los “mares nacionales” a pesar de que los estados les hayan dado nombre y límites: las aguas marinas se mueven sin cesar; así también los agentes contaminantes se trasladan con facilidad lejos de su lugar de origen. Defender el océano, ya sea del deshielo y su consecutivo aumento de volumen, como de la contaminación es una prioridad de quienes vivimos en el siglo XXI.
Ocean Sole, The Flipflop Recycling Company,2014.
Una gran labor.
Un gran arte artesanal .
De preciosas figuras .me maravillo .