Alumnos de doce escuelas de la comarca del Priorat y algunos niños enfermos de cáncer ingresados en el Hospital San Joan de Déu de Barcelona son los responsables de cada una de las 1.750 etiquetas del vino que, con fines benéficos, se vendió en la tercera edición de la Fira del Vi Solidari de Masroig (Tarragona).