Incluso quiénes no tocan ningún instrumento pueden componer ahora de manera intuitiva y divertida con la máquina para aficionados de la música: Beat Blox. El diseñador alemán Per Holmquist creó Beat Blox para experimentar la música y sus procesos de creación. Fascinado por la capacidad humana de establecer preferencias entre los géneros musicales, Per Holmquist quiso jugar con los pensamientos que una melodía desencadena, confiriéndoles sonido propio. La instalación consiste en una mesa de mezclas que incluye tres tocadiscos. Cuando el jugador coloca una pieza en uno de los tocadiscos se dispara un sonido que se repite cada vez que el peso gira por debajo del sensor. La combinación de los tres tocadiscos en movimiento genera ritmos y tiempos. El autor busca productor de juguetes para rediseñar Beat Blox e introducirla en el mercado.
